domingo, 20 de junio de 2010

él


Yo fui la niña de sus ojos
y él se marchó tan calladito
no pude decirle adiós, ni quise
se marchó pasito a pasito.
Sus suspiros se perdieron una noche
y no van a volver,
haga lo que haga no le puedo recuperar
la rabia me puede y por eso
no dejo que se abra una brecha donde la he de encerrar.

Extraigo recuerdos de mi memoria
para que por lo menos viva en mí,
le imagino misterioso
fuera de esta injusta historia
que me tiene sin vivir.

Ojalá pudiese decir que me echa de menos
pero sólo yo puedo tener sentimientos hacia él
y por eso me come mi pena al saber
que siento algo tan fuerte que no me va a corresponder.
Le recuerdo con una copa de wyshky en la mano
pensando en la vida, filosofando
a mi me encantaban sus teorías, su forma de pensar
de comerse la vida a bocados, de ganar la partida con las peores cartas...
en esos momentos nunca pensaríaque la iba a perder.

Ahora siento lo que yo llamaría "un amor muerto"

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